Hrry Potter y el DLC filosofal

¿Os imagináis si extrapolásemos el modelo de negocio del paradigma videojueguil a otros medios?

Hoy se pone a la venta el último libro de Harry Potter y vamos todos a comprarlo. Pago, vuelvo a casa, lo abro y empiezo.

"Los dos hombres precieron de l nd,  uns yrds de distnci en un sendero ngosto e iluminado por l lun."

¿Qué ha pasado aquí? ¿Me habré equivocado de idioma? A la tienda otra vez a buscar respuestas. "Ah, si, mire, que esta primera edición tiene un problemilla de impresión y parece que le faltan algunas letras, en cuanto descubramos cuales han desaparecido le enviaremos una carta con instrucciones para que pueda rellenar los huecos adecuadamente." Es lógico, hay que ser comprensivos y considerar su presteza en arreglar el problema por encima de su incompetencia y falta de profesionalidad iniciales.

DLC Quest

Ay los DLC, esos contenidos descargables tan de moda últimamente pero que yo sin embargo nunca he comprado. En serio, jamás he pagado por un DLC... o al menos no directamente, pues del RDR me compré la edición GOTY y del GTA IV la que incluía los Episodios de Liberty City. Bueno, a lo que íbamos, que durante toda esta generación he visto como esta práctica se volvía más y más común hasta el punto de que nada más anunciar el juego ya haya DLC disponibles (Batman, Far Cry 4, diferentes COD...), así que era cuestión de tiempo que alguien se animara a lanzar un juego que parodiara esta situación. La verdad, pagar por un juego paródico que se termina en menos de dos horas si te lo tomas con muuuuuucha calma y que podría pasar por la típica chorradita en flash de newgrounds no me hacía mucha gracia, pero estando por 60 centimillos en las ofertas de la Bundle Store y teniendo cromos de Steam con los que recuperar parte de la inversión... ¿por qué no darle una oportunidad?