Ex Machina

En el año 2002, un guionista medianamente conocido sorprendió a propios y extraños dando un pelotazo a nivel ventas con Y, el último hombre, un cómic publicado por Vertigo del cual no diré mucho porque todavía no lo he leído. Visto el chute de fama que le proporcionó la mentada serie, no dudo en que a nuestro aclamado autor (Brian K. Vaughan) le contratasen los de WildStorm a la primera de cambio para darles una nueva serie regular. Así, en 2004 el hombre que años después guionizaría la actualmente famosísima Saga empezó el recorrido editorial de Ex Machina, la cual tardó en publicar los 50 números que la componen nada más y nada menos que 6 añitos. Vamos, que a poco más se marca un Ellis con Planetary.

La premisa de Ex Machina puede sonar algo liosa, así que atentos a lo que voy a decir. El argumento se alarga durante los 4 años de mandato de Mitchell Hundred como alcalde de Nueva York desde el 2001 al 2005. Punto. Hasta aquí me seguís, ¿no? Trama política en la USA post 11-S. Seguimos. Años antes de presentarse a las elecciones, nuestro querido alcalde trabajaba de guardacostas, lugar donde un extraño explosivo le destroza media cara. ¿Aún lo tenéis todos? Bien, aquí vienen las curvas. Esta bomba le permite a Mitchell comunicarse con las máquinas, por lo que dedicó varios años a combatir el crimen bajo el sobrenombre de La Gran Máquina. No no no no, no os vayáis, ya sé que poner juntas las palabras "política" y "superhéroes" harán sonar las alarmas de más de uno, pero esperad y dejarme seguir.

Durante esa "etapa heróica" Mitchell se da cuenta que está causando más problemas que soluciones a la gente, por lo que toma la decisión de colgar el traje y presentarse a las elecciones para hacer más por su ciudad que con el disfraz a cuestas. La cosa pintaba realmente mal para nuestro protagonista, pero hay un pequeño detalle diferente en el mundo de este cómic y el nuestro: durante el 11S solo cayó una torre, consiguiendo Mitchell salvar la segunda.

Creo que ya empezáis a ver por qué Hundred ganó la alcaldía, ¿eh? A partir de este inicio (lo que os acabo de contar vendría a ser el primer capítulo) nos viene una trama realmente entretenida que combina el entramado político neoyorkino post 11S con las pesquisas de Mitchell sobre sus extraños poderes. Es cierto que, quizás, la trama política sería incluso mejor de suprimir todo el tema de La Gran Máquina y demás, pero en su conjunto Ex Machina me ha resultado sorprendentemente entretenido. Tiene muy buen ritmo, los personajes caen bien, los problemas en los que mete Brian a su criatura son muy imaginativos y no me arrepiento para nada el haberlo leído.

Eso sí, tristemente el final de la obra está un poco por debajo de lo esperado. No es malo, pero es como si dijera "Ups, llevo 46 capítulos, no he resuelto nada y en 4 se me acaba el contrato, será mejor que ponga el turbo", derivando a su vez todo al lado más heróico de golpe y porrazo y quedando un final... eso, sosete en comparación con lo anterior. Eso sí, aunque el guionista flaquee el dibujante (Tony Harris) mantiene un buen nivel a lo largo de toda la obra (y el en lo que respecta a las portadas ni os cuento).

Entonces qué, ¿se compra Ex Machina o no? Bueno, yo no lo haría, me ha gustado pero no como para desembolsar lo que debe costar una colección de ese tamaño. Si aún así queréis ir por la vía legal lo tendréis difícil, actualmente está descatalogada en España. La última edición disponible que salió fue una Absolute de Planeta en dos tomos inmensos por unos 110 euros, pero de eso ya hace bastante y dudo que os sea fácil de encontrar. Según su página web, a partir del próximo octubre ECC reeditará la serie en 10 tomos en tapa blanda, pero como comprenderéis me es imposible saber a estas alturas qué tal andará de precio o de características.