sábado, 23 de marzo de 2013

Stardust


Nunca lo he comentado por el blog, pero me encantan los cuentos. Cuando era pequeño mi madre compró una colección entera de cuentos de todo el mundo y aún a día de hoy disfruto dándoles una lecturilla de vez en cuando. Esto, que puede parecer casual, se vuelve relevante ante un material como el que tenemos hoy. Veréis, ¿alguna vez se os ha ocurrido cómo hacer un cuento para adultos? Hasta hace poco, yo nunca me lo pregunté, mas creo que ahora lo tengo claro: como un cuento infantil pero añadiendo todos esos detalles que omitimos porque los niños son demasiado pequeños para comprenderlos. ¿Por ejemplo? Pues qué hace la bruja mala cuando captura a alguien, cómo se conciben los híbridos entre hada y humano o simplemente haciéndolo mucho más largo y denso de lo que un infante podría captar. Sonará estúpido, lo sé, pero eso es Stardust y por ello es tan genial. 
Aunque muchos ya conocen el argumetno gracias a la película (la cual no he visto pero me han informado que tiende bastante más a la acción que el original) me gustaría hacer un inciso para ubicar a los que, como yo, creyeron que sería un film del montón y decidieron no darle una oportunidad. Basicamente la historia nos narra las aventuras de Tristán por el mundo de Faerie, un lugar de fantasía donde espera encontrar una estrella caída, la cual regalará a la chica que ama y así conquistará su corazón. El problema llega cuando descubre que la estrella es un ser vivo (con bastante mala hostia, por cierto) que está en el punto de mira de tres poderosas brujas y de los herederos al trono de un lejano reino, quienes necesitan algo que ella posee para tomar el lugar de su padre. Vamos, un "Todos a por la chica" de toda la vida pero sin el componente erótico-festivo.

Nunca había leído nada de Gaiman (bueno, sí, Ruído y señal, pero es una obra menor en comparación a The sandman u otras creaciones de este señor) pero si todo tiene esta calidad podría competir con Moore y Urasawa en ese podio comiquil que tengo en la cabeza. Basicamente, Neil coge la narrativa de los cuentos tradicionales e introduce Stardust en ella a la perfección (si me hubieran dicho que es un cuento de la misma época que los que tengo en mi biblioteca infantil me lo habría creído del todo).

La presentación es la típica de los cuentos tradicionales, letra grande, dibujos sobre o bajo el texto y a veces imágenes de dos páginas (solo diré que la del capítulo 5 es brutal).

Para qué negarlo, Stardust puede echar para atrás a mucha gente por su aire de cuento y terminar de dispersar al personal al tomarse tres capítulos en empezar a pasar cosas de interés, pero una vez empieza es un crescendo constante (el último capítulo lo leí en tensión total). Además es caro, sí, pero esos 25 euros que vale los merece y mucho: tamaño cómic, 175 ilustraciones, tapa dura, papel satinado, montones de páginas de bocetos e ilustraciones... o por lo menos esa es la edición que yo leí, la cual encabeza esta entrada. Creo que actualmente Planeta ha dejado de distribuirlo, lo que significaría (para el pesar propio y de muchos más) que es muy posible que sea ECC los que tengan los derechos... así que a saber qué edición sacarán. Independientemente de eso, se trata de un cuento precioso que no dudéis en leer si encontráis la oportunidad.

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