Scott Pilgrim

Scott Pilgrim es un cómic de seis tomos en blanco y negro escrito por el canadiense Bryan Lee O`Halley, serie conocida entre el grueso poblacional sobre todo gracias a la película de 2010 proagonizada por... alguien. En su momento vi la película y vale, me reí bastante con algunos chistes (en especial con Wallace, best gay ever) pero tampoco me decidí a leer el original inmediatamente. Fue ahora, cuatro años después, cuando saqué algo de tiempo y decidí darle una oportunidad, pues 1) la mayoría de los chistes los olvidara y así me pillarían más por sorpresa y 2) tenía ganas de una comedia ligerita. ¿Listos para descubrir la lucha de Scott Pilgrim contra los 7 malvados ex-novios de su actual pareja?

Toronto, Canadá. Scott es un tío de 24 años cuyo compañero de piso (y cama, que son pobres para comprar otra) es Wallace, el mejor gay que has visto y verás en un cómic. ¿Por donde iba? Ah, si, Scott. Este chaval está saliendo con una asiática de 17 años llamada Knives (¿quien en su sano juicio sale con una asiática llamada "cuchillos"?) cuando conoce a Ramona Flowers, de la cual se queda perdidamente enamorado a primera vista. Tras despachar (de manera poco sutil) a Knives, Pilgrim inicia una relación con Ramona... solo para descubrir que sus 7 malvados ex-novios quieren partirle la cara a todo aquel que salga con ella. Con esta premisa (la cual podíais haber supuesto son tal de leer la negrita del anterior párrafo) empieza una trama principalmente cómica, la cual está espolvoreada con multitud de referencias al mundillo del videojuego pero que incluso los profanos en ese campo disfrutarán horrores. Qué diablos, se trata de un cómic con escenas como esta...

Sí, este es Wallace.

Pero (y es aquí donde se separan película y cómic) mientras que el film se centra en el humor el original, a partir de más o menos el tomo 4, deja un poco de lado la parodia y pone el énfasis mucho más en sus personajes, haciendo que incluso estando en un universo lleno de gilipolleces y golpes a la cuarta pared sean mucho más creíbles conforme nos acercamos al final, en especial Scott y Ramona. De verdad que me esperaba un final normalito, pero Bryan logra cerrar su serie con algo a la altura de lo visto y que consigue colar algunas reflexiones sobre la juventud y cómo afrontamos las relaciones con los demás sorprendentemente acertadas. 

No os diré que os lancéis sin pensar a por ella porque son 6 tomos de 8,50€ cada uno y no los he encontrado en ninguna parte, así que desconozco las características y la calidad de la edición, pero si lo veis en una biblioteca o tienda y os parece que el formato es aceptable yo le daría una oportunidad sin dudar. Maldición, que hablamos de un cómic con referencias a Monkey Island, cómo no lo vais a catar de poder hacerlo.