jueves, 24 de abril de 2014

Monster


Ya han sido varias las veces que he nombrado a Monster en el blog, pero nunca me dio por hablar de ella por una razón muy simple: hacía demasiado que no le pegaba un repaso lo suficientemente completo como para ser mínimamente objetivo. Tal y como supondréis me la he vuelto a ver (mejor dicho, leer), así que llegó el momento de dedicarle unas palabras a la misma.



Düsseldorf, Alemania Occidental en 1986. Un día, el neurocirujano Kenzo Tenma (si, es un japonés que vive en Alemania, tomaoslo a cachondeo pero es un detalle que como veréis pesa en el desarrollo de la historia) ignora las órdenes de sus superiores y decide operar a un niño gravemente herido porque ha llegado antes que otros pacientes más famosos. Degradado por su insubordinación, poco tardará en descubrir que tal vez al salvar la vida a aquel niño acaba de crear a uno de los mayores asesinos en serie de toda la historia...

A partir de aquí, como supondréis, la cosa se resume en "pasan los años, nos reencontramos, te devuelvo el favor por salvarme matando a gente que te hace la puñeta aunque tú no me lo hayas pedido, la poli va detrás tuya y decides matarme para corregir el error que cometiste al operarme hace ya una década". Y mola. De verdad, la trama aunque pueda parecer la típica historia de hombre que intenta limpiar su nombre no lo es para nada, pues detalles como el ser asiático hacen que a la policía alemana le sea tremendamente fácil de reconocer, lo cual le obliga a viajar por las zonas más decadentes de la Europa post-caída del muro para que no lo capturen mientras intenta localizar a Johan (el niño que ya no es tan niño). 

Y... bueno, aquí empiezan los problemas. Monster se basa muchísimo (como casi todas las obras de Urasawa) en tirar de cliffhanger a saco (míticas situaciones donde el protagonista está jodido y no sabes cómo se librará o cerrar un capítulo con "Te diré la verdad sobre el accidente de hace 20 años..."). Y si, seguro que si se leía en su momento (pensad que fue de publicación semanal) la cosa funcionaba genial, pero 160 capítulos que terminan así y luego empiezan con un breve repaso/recapitulación... puede hacerse pesado, sobre todo si ya sabes qué sucederá a continuación. Además, el ritmo super pausado que tiene en algunos momentos y la cantidad de secundarios que mete (algunos irrelevantes del tipo "salgo en este capítulo y no vuelvo a aparecer en toda la serie") pasan factura al conjunto. A esto súmale momentos que tendremos la impresión de ya haber visto... dentro de la misma serie (véase las típicas escenas de Tenma llegar a un sitio y ponerse hacer de médico God Tier). Y qué leches, por momentos peca y mucho de ser excesivamente melodramático, además de que la cantinela de que todo el que ve a Johan diga que "Sentí que estaba viendo al diablo" llega un momento que te la tomas a cachondeo.

Sobre el final: mi opinión coincide con la de (mirad los comentarios) Rig y Anna.

Ojo, no os penséis ahora que Monster me parece una mierda ni mucho menos. Si hoy en día buscáis un Seinen es una de las mejores opciones, tanto en manga (9 tomos de 400 páginas a 15 euros cada uno, los cuales forman un mosaico bien chulo cuando los pones juntos) como en anime (74 capítulos, ni idea de su calidad aunque dicen que es super fiel y que además tiene un gran doblaje al español). Eso si, tened en cuenta lo que os he dicho, por lo que si os da por verlo quizás sea recomendable tomarlo "con calma", digamos 2-3 capítulos de anime al día como máximo (medio tomo al día si escoges manga), si te da por tragarlo en 3 días como hice yo es probable que se te termine por indigestar.

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