A veces, comprar un juego por su portada es lo más gratificante. Ayer mismo me hice con Patapon 3 en las ofertas de Sony casi de casualidad, pues lo vi de refilón cuando ya cerraba la página. No tengo ni pajolera idea de la temática del juego, pero vi su carátula, unas imágenes sueltas en la misma página de compra y, la verdad, parecía un amor y lo compré sin siquiera saber de qué género es. ¿Y sabéis qué? Me muero por jugarlo. Entre sobreinformación y cacería constante de rebajas, coger un título que desconoces solo porque "parece bonito" recupera parte de esa alegría de cuando eras pequeño y tus padres accedían a comprarte ese juego del que solo sabías el título pero aún así era el mejor, y la diversión que te otorgaba era proporcional a esa ilusión.
Lo mismo me pasó con Killer is Dead. Me sonaba que era un juego de ostias y que Suda estaba algo loco, aunque nunca había tocado nada del autor, pero Suditeh se lo pilló y me dije "¡venga, va, me apetece soltar mamporros absurdos!", y con esta frase me aventuré. Todo lo que veía era nuevo para mí; a diferencia de tantas otras veces, era imposible pensar en puntos como "ese es el nivel del tráiler" o "según los análisis, ya debo de estar cerca del final", y lo mismo con sus personajes e idas de olla. Era un juego que recibí como una bocanada de aire fresco después de ojear mi colección y ver que tengo muchos grandes juegos por jugar que ya sé como empiezan, como evolucionan y qué ofrecen en diseño y jugabilidad.
Os dije que era un juego de ostias. |
Mirror's Edge, Bayonetta y Deus Ex: Human Revolution, por poner unos ejemplos, fueron algunos de los agraciados por este don de la sorpresa, y los tres son firmes representantes de mi lista de juegos favoritos. Gears of War, por nombrar otra saga, fue mi puerta de entrada a la generación de la alta definición y el online, pero cuando lo jugué no había visto aún nada del título ni había catado nada similar, así que os podéis imaginar el mundo que me supuso. Fire Emblem: Radiant Dawn fue mi primer contacto con su género y su saga por una razón tan simple como "me apetecía un juego doblado al español", y cayó sin cuestionarme siquiera en qué tipo de rol se estructuraba. ¿Más atrás? Rayman 3, Ratchet & Clank, Meteos, Super Smash Bros., Ace Combat, Klonoa, Point Blank, Gunstar, Contra... Cuanto más retrocedo, más nombres recuerdo. ¿Nostalgia? No, simpleza. Echo de menos eso.
Acerca de Anti
sigue siendo inmune a las Death Note. Estudiante de
ingeniería industrial, gamer, amante y gamer otra vez,
tiene la ridícula esperanza de que alguien en alguna parte
se fije en sus textos. Quiere dominar el mundo para poder
destruirlo sin impedimentos.
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