viernes, 12 de octubre de 2018

Batman - El Tribunal de los Búhos



A lo largo de la historia de los cómics siempre ha perdurado esta idea de que para crear una buena trama de superhéroes, se necesita un villano tanto o más interesante que el protagonista, preferiblemente de un tipo contra el que el héroe no se ha encontrado antes, y no hay ejemplo más obvio de ello que con Batman: Batman contra psicópatas, Batman contra una secta, Batman contra Superman, Batman contra Al-Qaeda… ¿Y por qué dejar de hacerlo? Es una forma perfecta de sacar a nuestro héroe fuera de su zona de comfort, que no sepa cómo se desarrollará la acción y se sienta indefenso, creando una sensación de peligro y tensión palpable. El Tribubal de los Búhos, igual que muchos otros cómics del Caballero Oscuro, intenta crear una nueva situación para Batman, pero en vez de salir con algún villano que sale de la nada y ataca a Gotham, este cómic intenta canalizar la tensión y sorpresa no tanto creando un nuevo tipo de villano “que los lectores nunca hayan visto” sino más bien intentando reescribir una de las facetas de la historia de Gotham. 




-Advertencia: spoilers-



Según la introducción que hay en una de las ediciones de ECC, cuando Scott Snyder fue encargado para guionizar una nueva serie de Batman el hombre se encontró con un problema: él había estado planeando una historia con Dick Grayson como Batman, pero la editorial le pidió que el encapuchado fuera el clásico Bruce Wayne. Esto planteó una dificultad para el escritor, y es que con Grayson como protagonista podía recurrir de la (típica) tónica argumental del principiante aprendiendo a ser Batman y teniendo dificultades en el proceso para que la historia fuera más interesante, pero con Bruce Wayne, un hombre que ya lleva años y años en el papel, crear una situación de riesgo original es más complicado… pero finalmente Snyder salió con la idea de crear una entidad que llevara décadas y décadas maquinando en las sombras de Gotham, poniendo sobre la mesa la carta de que, incluso después de tantos años, Gotham aún tiene un buen número de secretos para Batman, quien creía conocer la ciudad mejor que nadie. 

Obviamente esta no es la primera vez que el mundo de la ficción presencia una premisa argumental conspiranoide de este tipo pero, como siempre digo, una idea no tiene que ser cien por cien original para aportar algo nuevo a la mesa, y en este caso El Tribunal de los Búhos no sólo aporta una sociedad secreta a la mitología de Gotham, sino que además estamos ante un cómic muy bien ejecutado


Al girar la historia entorno al Tribunal de los Búhos, una figura protagonista de leyendas urbanas de Gotham que no se saben si son ciertas o falsa, tenemos un primer acto en el que vemos a Batman investigando al respecto y rastreando todo tipo de pistas, un inicio que se toma su tiempo para crear misterio y atmósfera hasta el que vendría a ser el segundo acto donde el Tribunal se enfrenta a Batman, subiendo la escala y tensión para luego coger y rematar la faena en el tercer acto. Es estructuralmente una historia muy estándar, pero funciona a la perfección gracias a un buen ritmo, un buen guión, un muy buen dibujo... e incluso elementos simbólicos en la narrativa alrededor del concepto del búho como depredador y enemigo natural del murciélago. Este es uno de los puntos fuertes del cómic, y no tan sólo se queda en detalles narrativos sino que también trasciende en el dibujo, culminando en un par de secuencias visualmente muy creativas que consiguen darle un aire de misticismo a la historia, complementando a la perfección el misterio alrededor del Tribunal. 

Pero no todo es ideal, y es que aunque la primera lectura de El Tribunal de los Búhos me ha entrado de maravilla y me ha dejado muy satisfecho... no puedo dejar de encontrarme algunas carencias y posibilidades desperdiciadas conforme pienso más y más en el cómic en sí


En primer lugar, para ser un cómic que se toma su tiempo en su primer acto, tengo la sensación que el clímax se nota un poco precipitado y abrupto. Tal vez sea deliberado para crear un poco de confusión para el lector y servir como un último giro narrativo, un último estruendo, pero hubiera apreciado un final que se desarrollase un poco mejor. Luego hay la propia figura del Tribunal: contextualmente, mientras lo vas leyendo, tiene alrededor un misterio tangible y es una entidad amenazante porque justamente consiguen poner Batman contra las cuerdas y no sabemos del todo hasta dónde llega su mano… pero retrospectivamente, una vez ya has leído el cómic te das cuenta que son sólo una versión ligeramente más intimidante de los Canteros de los Simpson: simplemente un grupo de ricachones/privilegiados que conspiran para vivir bien y poco más. Obviamente al ser un grupo secreto hay muchas cosas de su historia como organización que no sabemos, pero hubiera preferido un poco más de claridad, una imagen más definida de hasta dónde llega su mano. Al final Batman dice algo en las lineas de “fueron sólo una banda de criminales como cualquier otra”, y tal vez Snyder quisiera deconstruir el hecho de que por mucho que el crimen sea de alta clase y haya continuado por décadas, no deja de ser un crimen como el que se puede presenciar con gangsters de tres al cuarto, pero esa idea devalúa la historia a la hora de la revisitar el cómic, porque para entonces ya sabemos que el Tribunal no es algo especial, quitando la magia de la lectura. 

Personalmente creo que podrían haber dedicado unas cinco o seis páginas simplemente hablando de hasta dónde llega la conspiración de los Búhos para hacer tangible el por qué son una figura importante dentro de Gotham. Quién sabe, tal vez son como Batman, una entidad en las sombras que no sólo vela por sí misma pero también para el beneficio de la ciudad aunque haya tenido que hacer un par de cosas moralmente ambiguas. Hubiera sido un detalle que daría mayor profundidad a lo que vemos en el papel, una mayor importancia. En vez de eso los Búhos son un enemigo más en la lista de Batman quienes casualmente en el tercer acto envían a asesinos a matar figuras públicas de Gotham para… ¿recuperar la Gotham que les pertenece? ¿Sembrar el caos? No es un plan muy bien explicado, la verdad. 

También hay otro par de oportunidades desaprovechadas que de hacerse bien hubieran elevado la calidad del cómic más allá, entre ellas la intención del Snyder de añadir elementos nuevos en la mitología de Gotham como ciudad, los cuales al final son un tanto inconsecuentes a pesar de ser tratados como una gran revelación. Y, para acabar, hay algunos elementos de la historia que… dejémoslo que ponen a prueba la suspensión de incredulidad (entre ellos el hecho de que lo que al principio es una historia de conspiraciones acaba siendo una historia de nanomachines, son). 


El Tribunal de los Búhos es una obra que de arreglarse un par de cosas de las que he hablado estaría perfectamente en la top tier de cómics de Batman, y es una pena, pero aún y con ello es un muy buen producto de entretenimiento: se toma su tiempo para establecer la historia, tiene secuencias visualmente imaginativas, el tono es on point, intenta ser relevante en el lore de Gotham, el dibujo de Greg Capullo es muy bueno… es un cómic que recomiendo leer, pero es de esos que después de acabarlo empiezas a notar algunas grietas, y está en tus manos el decidir si esas grietas entorpecen o no el disfrute que le puedes sacar a la obra. Yo personalmente no tengo ningún tipo de motivación de cara a comprar El Tribunal en un futuro, pero aun y con ello admiro la ejecución y el esfuerzo por intentar hacer algo interesante en vez de conformarse en ser una historia más de Batman y… quién sabe, ¡tal vez a tí sí te encante! Así pues, si lo veis en la biblioteca o estáis mirando qué cómic leer online, os recomiendo que le echéis un vistazo y lo valoréis por vosotros mismos.


¡Gracias por leer este texto y que paséis un buen día!

-Chato Maltés



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