Las cosas claras: no me ha gustado From hell. Por momentos se me ha hecho lento, ligeramente pedante y el dibujo no me ha terminado de convencer. Ahora bien, objetivamente es un cómic ejemplar que todo fan de las novelas gráficas debería leer. ¿La razón? Dos palabras: "Alan Moore" y "Jack el Destripador". Vale, admito que no sé contar, pero no me seáis tiquismiquis que el mensaje se capta de todas todas.