Como muchos ya sabréis, soy de la opinión de que mejor barato al año que caro al rato. Es cierto, a corto plazo tengo que ver cómo todo el mundo disfruta del nuevo AAA mientras que yo espero meses y meses hasta que baja de los 10€. Algunos me llaman rata; otros, ahorrador. Yo prefiero el término "adicto a las ofertas de Steam". Por ello, mientras que vosotros habéis pasado vuestras navidades jugando al Arkham city o al Skyrim, yo he vuelto a los pasillos de Aperture Science para ver cómo había quedado todo tras mi primera visita. ¿Queréis acompañarme?
Pese a que la primera vez que vi este trailer me pareció una chorrada, hoy por hoy soy incapaz de verlo sin sentir un cosquilleo en la nuca.
En esta ocasión la historia nos sitúa tras los eventos ocurridos en Portal, utilizando el minicómic Lab rat como puente entre ambos (tranquilos, aunque va incluido en los extras del juego también podéis leerlo en inglés desde este enlace). Por motivos que no detallaré, nos veremos de nuevo encerrados en los laboratorios de Aperture Science, siendo nuestra misión escapar de ellos... o morir en el intento. Quizás os suene mucho al primer juego, y es que mentiría si dijese que Portal 2 intenta ocultar sus orígenes; sin embargo, esta secuela retuerce de tal modo la premisa original que sería como comparar Super Mario 64 con Super Mario Galaxy.
Como recordaréis los que lo jugásteis, Portal pecaba de un desarrollo muy lineal, pues sus 19 cámaras de pruebas estaban demasiado encorsetadas en el bucle "resuelve el puzzle para llegar al ascensor". Portal 2, pese a que por momentos realmente repitamos esa secuencia, consigue maquillarla de forma magistral, integrándolas mucho mejor en la trama e introduciéndonos en una mayor variedad de retos y ubicaciones que el primer juego.
Asimismo, la otra lacra del original (que el 99% de los puzles se resolvieran mediante el sistema de "pon caja en botón rojo") también desaparece, pues la inclusión de nuevos objetos y mecanismos nos hará disfrutar como enanos ante cuanta prueba mortal nos tengamos que enfrentar.
Pero... ¿Es esto todo lo que nos reportará Portal 2, un montón de puzles cual juego de Layton? No. Además de su modo cooperativo (uno de los más divertidos que he probado en mucho tiempo) y de un grandísimo doblaje al castellano, Portal 2 recupera un último elemento del original con toda la maestría del mundo: su magnífico (y por momentos macabro) sentido del humor. Estoy seguro que más de uno, tras habérselo terminado, soltará cuanto menos una sonrisa al recordar alguna de las frases que nos dedican los "secundarios" a lo largo del juego.
Perlas como "En la siguiente cámara probarás el gel repulsor. A los del grupo anterior les dimos pintura azul para tener un grupo control, jeje. Bromas aparte, se rompieron todos los huesos. Los resultados fueron claros y esclarecedores" aparecerán de forma continua por toda nuestra partida.
Eso sí, me es imposible terminar esta entrada sin dedicarle por lo menos un párrafo a las dos canciones que más fácilmente asociaremos a este juego: Want you gone y Exile vilify, las dos caras de una misma moneda. Mientras que la primera es, al igual que Still alive, la brutal canción de créditos, Exile vilify será la que escucharemos en las radios que hay repartidas por el juego, desprendiendo una melancolía y una tristeza indescriptibles.
Want you gone
Recomiendo no oírla si no se ha jugado al juego por el alto número de Spoilers que posee.
Exile vilify
Eso sí, Portal 2 no es perfecto y os estaría haciendo un flaco favor de callarme lo siguiente: es muy fácil. Mientras que el original se volvía bastante complicado en las últimas fases, Portal 2 no supondrá ningún reto en casi ningún punto de su recorrido, perdiendo cierto factor de superación que le habría venido como anillo al dedo. Aún así, le encantará a todo aquel que disfrutó con su primera entrega, siendo compra obligada para cualquier amante de los videojuegos, máxime cuando son raras las ofertas de Steam donde lo lo ponen a menos de 3 euros.
NOTA: 9
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