Otros títulos barajados inicialmente para esta entrada fueron "Mierdas de Sudit para satisfacer a stalkers", "Estoy aburrido y quiero hablar un poco de mí" y "Como haga como todo el mundo esto en twitter seguro que recibo solo dos likes y me pongo a llorar".
1. Soy psicólogo. Duh. A poco más pongo una puta pancarta en el lateral del blog, he soltado lo de que monté un gabinete más veces aquí que en persona. Ahora bien, la parte interesante es que ser psicólogo me ha condicionado muy fuertemente a la hora de analizar lo que me rodea y las situaciones en las que me meto. No puedo, por ejemplo, jugar a un videojuego que utiliza mecánicas de condicionamiento y no darme cuenta que están ahí y cómo funcionan, a veces hasta el extremo de que afecta a mi disfrute del título en cuestión. Esto se aplica a casi cualquier situación social y/o movimiento político/publicitario que veo, lo que hace que a menudo...
2. Me creo más listo que los demás. Y estoy seguro de en el 99% de los casos lo soy, sobre todo cuando se trata de buscar los por qués de las cosas y los cursos de acción óptimos para realizar tareas o similares. Intento luchar contra esto y convencerme que todos tenemos opiniones y que mi contexto personal (tanto familiar como académico) me han moldeado para sobreanalizar situaciones y que la gente normal no pierde el tiempo con ello, pero las más de las veces lo percibo como pereza intelectual por su parte. Esta es una de las cosas que menos me gustan de mi personalidad e intento cambiarla día a día, pero no es fácil.
3. Me encanta hacer ejercicio. Es más, si no hago ejercicio de manera regular (un par de veces por semana) me voy poniendo cada vez de peor humor, se me agarrota cada vez más el cuerpo y empiezo a desarrollar conductas que perpetuadas podrían catalogarse como obsesivas. Mi teoría es que sin todas las hormonas positivas generadas por el ejercicio siento abstinencia de algún modo y por eso me pongo de tan mala hostia, pero yo que sé. Correr, nadar, jugar al baloncesto, ir al gimnasio, hacer karate, piragüismo... todo lo que implique volver a casa agotado me vale.
4. Tengo una autoestima de mierda. Pese a tener objetivamente unos buenos resultados académicos, no ser feo, estar en una forma física aceptable, montar mi propio negocio, haber tenido varias relaciones de pareja estables y demás confío una mierda en mis capacidades y siento un pánico ATROZ al fracaso (y en la carrera todos los test que hicimos sobre el autoconcepto apoyan este enunciado). Con todo, cuando digo esto casi nadie me cree, porque todo lo que me falta de autoestima lo tengo de orgullo y cabezonería, y a menudo la gente confunde mi mala hostia y falta de paciencia con las tonterías ajenas con una gran confianza en mí mismo.
5. El producto de entretenimiento que más me ha influido es Tengen Toppa Gurren-Lagann. Ya lo comenté cuando terminé la carrera, pero TTGL cambió mi forma de pensar y de actuar en muchos más aspectos de los que esperaría. Es cierto que sigo teniendo una autoestima de mierda, pero desde que la vi por primera vez hará unos... ¿4 años? He cambiado un montón bajo la filosofía del "Row row". Todavía estamos vivos, shit happens, ¿y qué? Levanta el culo y haz algo para cambiarlo. Dejarse aplastar por las circunstancias es fácil, levantarse para recibir la siguiente hostia y seguir intentándolo es lo realmente difícil. Qué eres, ¿un hombre o un bicho?
6. Mi peli favorita es Rebuild of Evangelion 2.22: You Can (Not) Advance. Probablemente. No soy nada cinéfilo, y pocas veces me planteo cuales son las películas que más me gustan, pero a 2.22 es la única película que no solo veo cada año, sino que la veo varias veces y con escenas que recuerdo relativamente a menudo. Que a ver, es Evangelion + TTGL, difícil no era que me gustara.
7. Cuando era pequeño me hicieron pruebas de inteligencia porque era demasiado tocacojones en clase. Según la versión oficial (aka mis padres) cada dos semanas el colegio les llamaba a reuniones con la profesora porque era un puto pesado, siempre les interrumpía las clases con dudas de cosas más avanzadas del temario y no prestaba atención a lo que decían de normal. Según mi versión me aburría como una ostra y leía el libro de texto por mi cuenta, y cuando tenía dudas que el libro no respondía preguntaba y listo. El psicólogo al que me llevaron dijo que no era superdotado ni nada, pero que tenía mucho potencial y que me mandaran a un internado en Santiago. Como tenía 8 años y eso implicaría criarme a 200 kilómetros de mi familia mis padres dijeron que ni de coña, y siempre he pensado que tomaron la decisión correcta. También le dijeron si me adelantaban un curso y me preguntaron si quería cambiar de clase, pero como mis amigos estaban en la mía y no conocía a nadie en cuarto dije que no. Sigo pensando que Miniyo tomó la decisón correcta (me habrían comido vivo con lo cobardica y pringado que era de aquella).
8. Tengo muchísima curiosidad por cómo sería en otros universos paralelos. ¿Cómo sería el Sudit al que adelantaron un curso? ¿Y al que mandaron a un internado y que solo veía a su hermano pequeño en vacaciones? No digo que me gustaría vivir sus vidas, pero sí que me encantaría saber más sobre ellas y no sé, tomarme unos Nestea con mis yoes alternativos. ¿Serían bebedores de Nestea como yo o tomarían de ese asqueroso Lipton?
9. Me siento fatal cada vez que mato un bicho. No soy vegetariano ni vegano, y si bien entiendo su postura considero correcto matar animales para nuestro consumo. Ahora bien, hacerle daño o matar animales si no es para mi supervivencia (aka defensa propia o sustento) me parece horrible, y cada vez que piso un caracol sin darme cuenta o algo me siento super culpable. Esto ha llegado al extremo que cuando me muevo de noche por la finca no uso linterna para ver donde voy (no me hace falta), sino para asegurarme de que no piso a nada con vida por accidente.
Teniendo en cuenta que cada vez que llueve salen 800 caracoles de todas partes, que muchos son enanos y que esto es Galicia os imagináis lo bien que me lo paso cuando llega el invierno.
10. Llevo trabajando desde los 12 años. Mis padres tienen una tienda de alimentación, y desde que era pequeño iba allí a echar una mano reponiendo y demás chorradas. A partir de los 12 me colocaron atrás a encargarme de pedidos y demás, y de los 13 en adelante ya era como un empleado más que se encargaba de despachar, limpiar, cobrar y todo lo que hiciera falta. Durante años mis vacaciones de Navidad y verano han incluido largas estancias en la tienda, y desde que saqué el carnet de conducir también conduczo 40 minutacos hasta el proveedor, cargo el coche y vuelvo a la tienda con mercancía. Es más, en el momento en que se publique esta entrada estaré de camino a un proveedor, así que ya veis que el trabajar por cuenta propia no quita el seguir ayudando en el negocio familiar. ¿Alguien duda que estas Navidades me tomaré una "semana libre" del gabinete para ayudar allí?
Bonus Track. El pin de mi tarjeta de crédito es la fecha en la que perdí la virginidad. Y cerramos con uno realmente estúpido y que no creo que nadie se esperase. La verdad fue una completa casualidad, pues la clave predefinida con la que me vino la tarjeta podía ordenarse como la fecha en que me desvirgué, y como me hizo tanta gracia en su momento lo dejé estar, y ahí sigue. Estoy seguro que de no ser por el pin hace años que me habría olvidado de qué día sucedió.
Y esto ha sido todo por hoy. Si os ha gustado comentadlo y no sé, quizás haga otro en un par de semanas/meses/años. Hay muchas más chorradas sobre mi vida que soltar, como mi afición malsana a los amv, mi necesidad imperiosa por ayudar a viejas, mi incapacidad para trabajar con personas mayores, mi opinión del trabajo en equipo y muchas más.
Ah, sí, y ya puestos por rizar el rizo, comentaré alguna curiosidad u opinión sobre qué pienso de cada uno de los que respondan a esta entrada. Prometo no faltar al respeto a todos aquellos que no me han hecho la cobra en un bar de Barcelona. <-- esta curiosidad queda pendiente para otra sesión.
5. El producto de entretenimiento que más me ha influido es Tengen Toppa Gurren-Lagann. Ya lo comenté cuando terminé la carrera, pero TTGL cambió mi forma de pensar y de actuar en muchos más aspectos de los que esperaría. Es cierto que sigo teniendo una autoestima de mierda, pero desde que la vi por primera vez hará unos... ¿4 años? He cambiado un montón bajo la filosofía del "Row row". Todavía estamos vivos, shit happens, ¿y qué? Levanta el culo y haz algo para cambiarlo. Dejarse aplastar por las circunstancias es fácil, levantarse para recibir la siguiente hostia y seguir intentándolo es lo realmente difícil. Qué eres, ¿un hombre o un bicho?
6. Mi peli favorita es Rebuild of Evangelion 2.22: You Can (Not) Advance. Probablemente. No soy nada cinéfilo, y pocas veces me planteo cuales son las películas que más me gustan, pero a 2.22 es la única película que no solo veo cada año, sino que la veo varias veces y con escenas que recuerdo relativamente a menudo. Que a ver, es Evangelion + TTGL, difícil no era que me gustara.
Una de mis escenas favoritas de cualquier cosa.
7. Cuando era pequeño me hicieron pruebas de inteligencia porque era demasiado tocacojones en clase. Según la versión oficial (aka mis padres) cada dos semanas el colegio les llamaba a reuniones con la profesora porque era un puto pesado, siempre les interrumpía las clases con dudas de cosas más avanzadas del temario y no prestaba atención a lo que decían de normal. Según mi versión me aburría como una ostra y leía el libro de texto por mi cuenta, y cuando tenía dudas que el libro no respondía preguntaba y listo. El psicólogo al que me llevaron dijo que no era superdotado ni nada, pero que tenía mucho potencial y que me mandaran a un internado en Santiago. Como tenía 8 años y eso implicaría criarme a 200 kilómetros de mi familia mis padres dijeron que ni de coña, y siempre he pensado que tomaron la decisión correcta. También le dijeron si me adelantaban un curso y me preguntaron si quería cambiar de clase, pero como mis amigos estaban en la mía y no conocía a nadie en cuarto dije que no. Sigo pensando que Miniyo tomó la decisón correcta (me habrían comido vivo con lo cobardica y pringado que era de aquella).
8. Tengo muchísima curiosidad por cómo sería en otros universos paralelos. ¿Cómo sería el Sudit al que adelantaron un curso? ¿Y al que mandaron a un internado y que solo veía a su hermano pequeño en vacaciones? No digo que me gustaría vivir sus vidas, pero sí que me encantaría saber más sobre ellas y no sé, tomarme unos Nestea con mis yoes alternativos. ¿Serían bebedores de Nestea como yo o tomarían de ese asqueroso Lipton?
9. Me siento fatal cada vez que mato un bicho. No soy vegetariano ni vegano, y si bien entiendo su postura considero correcto matar animales para nuestro consumo. Ahora bien, hacerle daño o matar animales si no es para mi supervivencia (aka defensa propia o sustento) me parece horrible, y cada vez que piso un caracol sin darme cuenta o algo me siento super culpable. Esto ha llegado al extremo que cuando me muevo de noche por la finca no uso linterna para ver donde voy (no me hace falta), sino para asegurarme de que no piso a nada con vida por accidente.
Teniendo en cuenta que cada vez que llueve salen 800 caracoles de todas partes, que muchos son enanos y que esto es Galicia os imagináis lo bien que me lo paso cuando llega el invierno.
Foto de relleno. No hablo de mis mascotas porque ya dan para más de 10 curiosidades por sí mismas. Por ejemplo, ¿sabíais que el gato de la foto se cayó de un noveno piso? Eso sucedió 4 años ANTES de sacar esta foto #GatoInmortal
10. Llevo trabajando desde los 12 años. Mis padres tienen una tienda de alimentación, y desde que era pequeño iba allí a echar una mano reponiendo y demás chorradas. A partir de los 12 me colocaron atrás a encargarme de pedidos y demás, y de los 13 en adelante ya era como un empleado más que se encargaba de despachar, limpiar, cobrar y todo lo que hiciera falta. Durante años mis vacaciones de Navidad y verano han incluido largas estancias en la tienda, y desde que saqué el carnet de conducir también conduczo 40 minutacos hasta el proveedor, cargo el coche y vuelvo a la tienda con mercancía. Es más, en el momento en que se publique esta entrada estaré de camino a un proveedor, así que ya veis que el trabajar por cuenta propia no quita el seguir ayudando en el negocio familiar. ¿Alguien duda que estas Navidades me tomaré una "semana libre" del gabinete para ayudar allí?
Bonus Track. El pin de mi tarjeta de crédito es la fecha en la que perdí la virginidad. Y cerramos con uno realmente estúpido y que no creo que nadie se esperase. La verdad fue una completa casualidad, pues la clave predefinida con la que me vino la tarjeta podía ordenarse como la fecha en que me desvirgué, y como me hizo tanta gracia en su momento lo dejé estar, y ahí sigue. Estoy seguro que de no ser por el pin hace años que me habría olvidado de qué día sucedió.
Y esto ha sido todo por hoy. Si os ha gustado comentadlo y no sé, quizás haga otro en un par de semanas/meses/años. Hay muchas más chorradas sobre mi vida que soltar, como mi afición malsana a los amv, mi necesidad imperiosa por ayudar a viejas, mi incapacidad para trabajar con personas mayores, mi opinión del trabajo en equipo y muchas más.
Ah, sí, y ya puestos por rizar el rizo, comentaré alguna curiosidad u opinión sobre qué pienso de cada uno de los que respondan a esta entrada. Prometo no faltar al respeto a todos aquellos que no me han hecho la cobra en un bar de Barcelona. <-- esta curiosidad queda pendiente para otra sesión.
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