viernes, 2 de mayo de 2014

Uncharted 2: El Reino de los Ladrones


Al César lo que es del César: así como a Uncharted le metí palos hasta por donde no da el sol, Uncharted 2 no se los merece. Sin llegar a extremos como el de Zone of the Enders y Zone of the Enders 2, es innegable que el salto de calidad de un título a otro es superlativo, y realmente me alegro de haberle dado una segunda oportunidad a esta saga (cosa que, de no ser porque un colega me dejó este título, ni de coña hubiera sucedido tan pronto). Aclarado este punto y resistiendo el ansia de copiar el viejo chiste de Hide y llamarlo Doscharted, vamos con el análisis.

Al igual que en la primera parte controlaremos a Nathan Drake, mindundi que se meterá de cabeza en un lío de narices con gente muy chunga en la búsqueda de la ciudad perdida de Shambala. Creedme, no vais a jugar un Uncharted por su historia, pero al menos esta vez (y a diferencia de en el original) cumple sobradamente su papel de entretenernos e incluso logra sorprendernos en algunos puntos. Asimismo, así como el Drake del uno me parecía muy hostiable a este solo quise darle una colleja en un par de ocasiones, pareciéndome un tío majo la mayor parte del tiempo (cosa que también se aplica a las coprotagonistas, en especial a Chloe).

Y a partir de ahí... bueno, tenemos lo mismo que en la primera parte pero siendo condenadamente divertido, con un ritmo que no decae casi nunca y en definitiva el germen del "fenómeno scrip molón" que tan de moda ha estado en esta generación. No es perfecto, pues los tiroteos son excesivos en los últimos niveles, los scrips son demasiados (e incluso pesados) en algunos momentos (sobre todo al final) y en la escena de la nieve hay una disonancia ludonarrativa de la hostia (pasamos de una cutscene de Nathan agonizando por un balazo a matar a un comando a base de lanzagranadas a otra cutscene de Nathan echando la bilis), pero con todo repito, es un título tremendamente divertido (incluso con cierto "autohomenaje" al uno demasiado cantoso, pues prácticamente nos intentan colar el mismo giro en ambos juegos).


Oh, si, también tenemos scrip de todo yéndose a la mierda con la cámara enfocándote de frente y teniendo que correr sin ver qué tienes delante. Cómo los odio.

En fin, no veo motivos para alargar esto más. Uncharted (el primero) es de lo peor que vi en esta gen y un juego cuya fama no se corresponde para nada con el título de marras, pero su secuela no solo cumple con las expectativas sino que se ganó por méritos propios que años después títulos como Tomb Raider le tomaran como modelo a seguir. Tiene cosas que no me gustaron y errores bastante molestos (eso de a veces intentar activar la muerte sigilosa y que Nathan haga lo que le sale de ahí abajo es una putadaza) pero me he divertido con él y al final eso es lo que cuenta. Ale, me marcho a jugar Uncharted 3, que lo tengo en el plus y en un par de semanas me caduca la suscripción.

NOTA: 8

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