Ante todo una cosa: este texto no va a ir tanto sobre la calidad de Narutaru sino de la razón por la cual me decepcionó tantísimo. Conocí Narutaru hará casi dos años en una entrada sobre deconstruir géneros, en la cual Rokuso se pasó a saludar y me recomendó un buen puñado de series que según ella hacían muy bien ese trabajo, estando entre las nombradas cosillas como Oyasumi Punpun y Mawaru Penguindrum, las cuales me encantaron nada más leerlas. Otra de las allí listadas era Narutaru, la que decía era una especie de deconstrucción loca de Digimon al que comparaba con Drakengard pero en fin, como que entonces no terminó de llamarme la atención y me decidí por otra antes que ella.