The Ultimates

Cuando a mediados de Abril hablaba sobre The Authority dije que fue uno de los cómics más importantes de su tiempo porque sin él jamás habría existido The Ultimates. Como podéis deducir a partir de esta frase, The Ultimates es el cómic mainestream más importante que se ha publicado en este nuevo milenio. Suena exagerado, lo sé, pero me atrevería a afirmar desde el dúo Watchmen - El regreso del caballero oscuro ningún cómic sacudía con tanta fuerza los cimientos del mercado masivo estadounidense, cambiando por completo la manera de escribir cómics desde entonces.

Ultimates es la renovación de un mito, en este caso el de los Vengadores. ¿Esa peli tan genial que estrenaron hace unos años? Nunca habría existido sin Ultimates. Admito que es algo difícil de creer, pero el tono, los personajes, las situaciones... todo lo que hace que Avengers sea tan genial fueron Millar y Hitch los que lo trajeron de nuevo, cogiendo a los hasta entonces estancados Vengadores y actualizándolos en el universo Ultimate como ya habían hecho anteriormente con Spiderman o los X-Men. Fuera 50 años de continuidad, es la hora de imaginar cómo serían los Vengadores de haberse creado en el año 2002. 

¿Banner? Un hombrecillo triste y horrible totalmente superado por las circunstancias que lo rodean. ¿Thor? Un hippi pacifista que en su papel de hijo de Odin se opone a las costumbres capitalistas y funda poco menos que su propia religión. ¿Iron Man? Exactamente tal y como sería años después en las películas. ¿Ojo de Halcón? Joder, no se puede molar tanto como este tío, me declaro fan indiscutible de ese hombre. ¿Nick Furia? Negro. Sí, vale, hoy en día es negro y lo interpreta Samuel L. Jackson, ¿pero sabéis por qué?

¡Hasta eso es idea suya! The Ultimates no tiene un grandísimo argumento, pero supone un manual sobre cómo hacer un cómic de molar. Lo digo en serio; The Ultimates cambió las reglas, y desde su publicación si quieres hacer un cómic de hostias genial tu deber es comprarlo y estudiarlo hasta entender qué lo hace grande y hacer exactamente lo mismo. No es una cuestión de simplemente hacer las cosas más llenas de sangre, tacos o poner las viñetas más grandes; es una cuestión de ritmos, planos y narración. Al final del sexto capítulo de Ultimates se nos presentan dos escenas a la vez, una apacible en casa de Tony Stark y otra aterradora en los laboratorios de SHIELD, y que Millar desarrolle ambas simultáneamente logra un contraste que refuerza el drama que se masca en SHIELD, y el resultado final es BRILLANTE.

Leer The Ultimates es tremendísimamente recomendable a poco que te gusten los cómics porque pocas veces encontrarás un cómic de hostias tan o más divertido, pero resulta especialmente importante si pretendes hacer algo similar, pues si lo lees por encima y no entiendes qué es lo que realmente lo hace grande... te queda un The Ultimates 2.

No lo voy a negar, el hype que tenía por esta secuela era impresionante. Compré The Ultimates un sábado sin tener la menor expectativa al respecto, y nada más terminarlo estaba igual que tras un maratón con los 8 últimos episodios de TTGL, así que en cuanto salí de la universidad el lunes siguiente me recorrí todo Santiago buscando una librería que tuviera la secuela disponible para leermela del tironazo. Costaba 40 euros, pero solo con que el cómic fuera igual de bueno que el primero yo ya los pagaba encantadísimo. Y sí, al principio supe que había hecho la elección correcta. Al principio.

Aproximadamente a la mitad del tomo The Ultimates sufre algo que me gusta llamar "el síndrome de Bayonetta 2": se cree que la única forma de superar la épica del primero es mediante el drama y pierde por completo el norte al respecto. The Ultimates 2 intenta marcarse un Watchmen cubriéndose de una capa de seriedad y "Esta vez sin chistes". The Ultimates (y Bayonetta, para qué negarlo) funcionan porque además de la épica tienen unos personajes chulos, los cuales aprovechan cualquier situación para demostrar que son los mejores y que por jodida que esté la cosa ahí estarán ellos para romper tus expectativas y divertirse en el proceso. ¿Que exagero? ¡Já! El último capítulo de Ultimates me lo pasé DESCOJONÁNDOME con todo lo que estaba pasando y el cómo lo afrontaban los personajes. No voy a dar datos concretos, pero os prometo que la mejor frase de toda la puta historia de los superhérores la suelta el Capitán América en medio de poco menos que el jodido apocalipsis. 

¡Y ES GENIAL! The Ultimates, Authority, Bayonetta, TTGL, Revengeance... Todos ellos funcionan porque mezclan en la justa medida el "Es imposible que puedan con eso" con ingentes cantidades de "Sí, podemos hacerlo Y LO HAREMOS RIÉNDONOS EN SUS CARAS". El Over The Top es una filosofía de trabajo complicada de usar, pero si se lleva bien es casi imposible que el resultado decepcione. Millar en esta secuela pierde por completo el rumbo a la mitad y se piensa que por meter la viñeta más grande del cómic mainestream (un desplegable enorme en medio de la batalla final) va a lograr imprimir un sentimiento de épica a la situación, pero para nada es así. Te has pasado casi toda la serie de una forma y pretendes que en los últimos 6 números tus Ultimates logren un efecto similar al del Miracleman de Moore, pero para nada es así. The Ultimates 2 no es un mal cómic, pero al igual que en el caso de El contraataque del caballero oscuro olvida por completo lo que hacía grande al original y nos da un producto muy por detrás de lo que debería haber sido.

Del dibujo de Bryan Hitch ni una queja, es magnífico. Por cierto, no tiene que ver con la foto pero debo decir que el malo final de Ultimates 2 es la putísima hostia y mola cinco millones. Cómo no, el hijoputa apenas se luce y la confrontación final resulta anodina de pelotas.

Y ahora llega el momento de hablar de dinero. Panini ha puesto a nuestra disposición dos formas de comprarlo: 4 tomos de 10 euros que APESTAN (tanto literal como metafóricamente, pues el papel y la tinta son tan putamente malos que he tenido que poner los míos a ventilar para ver si se le iba el olor pero nada) o los dos tomos que he colocado anteriormente que valen 35 y 40 euros respectivamente. No seré yo quien recomiende dejarse 40 eurazos en Ultimates 2 porque realmente considero que no los vale, pero si te gustan los cómics al estilo Authority esos 35 euros por el primer volumen de Ultimates bien los merecen.

Y nada, eso es todo. A modo de explicación rápida por si hay alguien interesado en comprarlos pero no dispuesto a dejarse 35 euros, decir que Ultimates 1 se divide en los tomitos Superhumanos y Seguridad Nacional (10 pavos cada uno) y Ultimates 2 en Dioses y monstruos y El gran robo de América (también a 10 euros cada uno). Quizás Ultimates 2 sí diría que de comprarlos intentárais haceros con la versión barata y apestosa, pero si os gusta esta clase de material dejaros el dinero en la edición buena de The Ultimates. A la larga me lo agradeceréis.