Los Premios Lunares de Anti
~ Edición 2017 ~
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| Imagen obra de picketG |
Premio Perro de Tierra al mejor nivel:
Castillo de Hyrule - The Legend of Zelda: Breath of the Wild
El Castillo de Hyrule siempre ha sido el clímax de cualquier Zelda, y en Breath of the Wild no podía ser menos. Desde el primer momento se nos indica nuestro destino y la necesidad de derrotar a Ganon, y para ello debemos superar el castillo, un castillo envuelto por un aura maligna y oscura, protegido por los mayores peligros, un objetivo que siempre tenemos cerca y presente pero que nos intimida demasiado como para afrontarlo sin ayuda. Así pues, empezamos un viaje, una aventura con el único fin de prepararnos para conquistar ese castillo y derrotar al mal que guarda. Y cuando nos sentimos valerosos de verdad, listos para hacerle frente... dará igual, porque una vez dentro nos sentiremos más pequeños que nunca. Da igual cuantos pueblos nos den su apoyo, cuantas armas hayamos reunido, nos sentiremos abrumados, abrumados por toda la arquitectura a explorar, por todos esos enemigos en nuestra búsqueda. Pero, por más que el momento nos sobrecoja, no nos sentiremos impotentes, porque hemos superado grandes obstáculos en nuestro viaje hasta aquí, y sabemos que podremos con esto.
En un juego que hace gala de una libertad como nunca habíamos visto antes, esta zona final se convierte en el mayor regalo que nos podamos imaginar. Sus posibilidades son increíbles, su diseño es exquisito y el único límite es nuestra propia voluntad y pericia. Y la ambientación, la ambientación es perfecta.
Premio Dragón de Metal al mejor combate:
[Spoiler: Jefe final] - Final Fantasy XIV: Stormblood
Un buen enfrentamiento final debe ser exigente, espectacular, con buena música y tener carga emocional. Sí, soy bastante exigente con los combates de clausura, pero de vez en cuando hay alguno que me enamora, y esta vez le ha tocado a la segunda expansión de Final Fantasy XIV. No daré detalles por spoilers importantes, pero os dejo este enlace para quien quiera presenciar una de las grandes batallas del género MMO.
Premio Conejo de Madera a la mayor sorpresa:
Hatoful Boyfriend
No esperaba que Hatoful Boyfriend me gustara tanto, es que ni por asomo. Ha sido mi primera visual novel y no podría haber tenido una mejor primera experiencia, me ha mantenido enganchado hasta el final y ya tengo ganas de leer su secuela. Bromas sobre pájaros y palomas a parte, merece mucho la pena darle una oportunidad, no como japonesada rara sino como lo que verdaderamente es: un título de calidad.
Premio Serpiente de Agua al mejor juego de móviles:
Arkanoid vs Space Invaders
Todos hemos jugado Space Invaders, pero... ¿Qué pasaría si, en lugar de disparar, nos dedicáramos a devolverles sus propios proyectiles? Ésta es la idea detrás de Arkanoid vs Space Invaders, donde destruiremos bloques y naves alienígenas a base de rebotes, poderes especiales y referencias a toda la historia de Taito. Tiene un montón de fases y engancha cosa mala.
Premio Rata de Tierra a la mejor rejugada:
Demon's Souls
Por fin Sudit ha decidido darle al primer Souls, y con la excusa del cooperativo —que cierra el 28 de febrero— yo también lo estoy revisitando. Después de largos recorridos por Dark Souls 1, 2 y Bloodborne, uno aprecia todavía más el diseño de Demon's Souls, con algunos de los niveles más exquisitos de toda la saga, jefes con mecánicas propias que los hacen únicos y unos mundos poblados por auténticas y perturbadoras criaturas salidas del Averno. El más macabro de sus hermanos, y el que sentó las bases para un fenómeno que aún hoy dura.
Premio Tigre de Fuego al mejor juego de matar, disparar y ver cosas que explotan:
Doom (2016)
Lo siento, Binary Domain, has sido un gran competidor y te has quedado cerca, pero tenías un rival duro. El último Doom es, simple y llanamente, uno de los mejores shooters que he jugado jamás, un torrente de balas, explosiones, sangre y violencia frenético, con un ritmo sin pausas que nos motivará a sacarnos la jugada más acrobática de nuestro arsenal para lucirnos como los enormes marines cachas que somos.
¡¡¡DOOM, MOTHERFUCKER!!!
Premio Buey de Metal al juego con las partidas más largas:
Civilization VI
Es mi primer Civilization, y sabía que las partidas eran largas, pero... ¡Una sola partida me dura tanto como la campaña de algunos juegos modernos! Lo normal es que cada una dure alrededor de ocho horas... ¡Ocho horas! ¡Ocho! Pero se lo tolero porque cada partida es un intenso reto intelectual, una prueba para los más estrategas, y me sirve como un juego de fondo de armario excelente. Muy completo y con muchísimas posibilidades.
Premio Caballo de Agua al mejor juego que nunca voy a terminar:
Yakuza Kiwami
Os he contado alguna vez mi historia con Xenoblade, ¿verdad? Lo empecé y me dieron la clásica misión de ir a la primera ciudad e interactuar con los cuatro NPC de turno. Pues bien, de camino a la ciudad vi un puntito brillante en el suelo, me acerqué y descubrí que era un objeto. ¡Viva! Y vi otro al lado, así que también fui a recogerlo. ¡Y otro detrás suyo! ¡Y un montón más por la pradera! Y fui recolectando objetos, fui siguiendo los puntos brillantes mientras esquivaba todos y cada uno de los enemigos y peligros del mapa... Hasta que terminé aún no sé donde. Sin darme cuenta, me había alejado muchísimo de la zona inicial, y valoré empezar una nueva partida porque no sabía ni cómo volver, pero... ¡Puntitos brillantes! Una fuerza superior a mí me obliga a recogerlos todos cada vez que intento jugar a Xenoblade, así que no avanzo ni queriendo.
Con Yakuza Kiwami, lo mismo, tanto por misiones secundarias como por más malditos puntos brillantes. Diría que parte de la culpa la tiene el vergonzoso piedra-papel-tijeras de chicas en bañador, pero por suerte me da tanto repelús que casi ni lo he tocado. Sin embargo, ha sido todo un soplo de aire fresco a mi ludoteca, hacía años que no me metía en un beat'em up y Kiryu se está convirtiendo en el hombre de mis bragas. ¡Y tiene una lista de todos los platos que has comido y los que no! Juego obsesivo-compulsivo del milenio. Y Majima es un grande.
Premio Cerdo de Madera al mejor regreso al pasado:
Sonic Mania
Pocas veces vemos tanto amor por un clásico como aquí. Sonic Mania es un homenaje a los mejores años del erizo, una reinvención y vuelta de tuerca de sus fases más icónicas, así como unos nuevos niveles a la altura de nuestros mejores recuerdos. No es nostalgia, no es por los guiños... Sonic Mania es un enormísimo plataformas que nada tiene que envidiar a los reyes de la saga.
Premio Yoko Taro al mejor juego de Yoko Taro:
NieR: Automata
Mi amor, con spoilers:
http://thisblogendswithyou.blogspot.com.es/2017/05/nier-automata-spoilers.html
Premio Gallo de Fuego al mejor juego del año 2017:
The Legend of Zelda: Breath of the Wild
No sé ni cómo podíais dudar de cual iba a ser el ganador indiscutible. Uno de los juegos más revolucionarios y, espero, más influyentes de los últimos años merece todo el reconocimiento posible. Es la libertad hecha videojuego, es la creatividad convertida en polígonos. Está vivo, ¿entendéis? Este mundo está vivo, es un organismo vivo, es un ecosistema complejo y glorioso. Breath of the Wild es uno de los mejores videojuegos que he probado nunca, quizás uno de los mejores que probaré jamás. Leed la entrada que le dedicó Sudit, decidme si no es pasión lo que hay en esas líneas. Si amáis los videojuegos, si os interesa este mundillo, es un título que debéis experimentar por vosotros mismos.
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Acerca de Anti
¡Para el año que viene,el GOTY se va a llevar
el flamante premio
Perro de Tierra!
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