Castlevania: SotN es una patata cruda

Este montaje de Chato es más divertido que el propio juego.

Eis, qué tal todo. Castlevania Symphony of the Night me ha dado una indigestión equivalente a tragarse del tirón un saco entero de patatas crudas, y de verdad que no me explico por qué la gente se hace tantísimas pajas con él hoy en día (de las comparaciones con Super Metroid ya ni hablamos porque madre de Cristo). Que sí, que yo también he visto el vídeo de Mark Brown sobre SotN y conozco su influencia posterior en otros títulos, pero como juego ha envejecido de pena. Así que vamos a ver qué diablos le pasa a SotN y por qué lo he abandonado allá por  el 124%: 

Final Fantasy VII

Lo primero es lo primero: jugué a Final Fantasy VII hace poco, y cuando digo hace poco me refiero a que me lo terminé hace, como mucho, dos años. Eso implica que:

1. Ya había acabado Final Fantasy VI años antes.

2. Ya no estaba en mi etapa mojabragas (eso fue con Final Fantasy X).

Así pues, me considero preparado para hablar de él sin fanatismos baratos y con conocimiento de la causa. ¿Queréis unas primeras impresiones rápidas? Ahí van: Final Fantasy VII es un juego rematadamente ingrato y tosco que no redefinió nada, y todos deberíais jugarlo.

Analizando que es gerundio 3

Y 4 meses después de la última ración de Analizando volvemos con las microcríticas favoritas de este humilde redactor.

Final fantasy VI Advance

Creo que, de entre todos los juegos que tengo en formato físico, el que más lástima me daría perder sería este. No lo digo solo porque me encante su cajita de cartón ni por haberle dado más de 60 horazas de puro vicio, sino porque fue uno de los juegos que más me costó conseguir en su momento, obteniéndolo finalmente mediante una puja en ebay que alcanzó un precio que hoy por hoy ni me plantearía pagar por videojuego alguno. Sin embargo, no me arrepiento. Final fantasy VI es uno de los mejores juegos que he probado nunca, y esta versión para GBA traduce el original de la SNES y lo vuelve portátil. ¿Qué más se le puede pedir a un juego?

La OST de este juego es brutal, y los 18 minutos que dura Dancing Mad (el tema de la batalla final) conforman uno de los temas más sorprendentes de la historia de los videojuegos. Ella sola daría para un artículo a parte.