miércoles, 18 de julio de 2012

Kingdom hearts



Hacía años que no tocaba este juego. Así como su secuela ha recibido una rejugada bianual desde el momento de su salida, por algún motivo que no lograba comprender nunca tenía ganas de hacer lo mismo con su primera entrega. Así pues, este año en conmemoración al décimo aniversario de su lanzamiento me propuse rejugar lo que yo llamo "la trilogía Kingdom hearts": Kingdom hearts, Kingdom hearts: Chain of memories y Kingdom hearts II. ¿Que dónde dejo los mil spin off que Square se ha dedicado a sacar durante los últimos años? En la estantería de la tienda de videojuegos, pues no tengo pensado comprarme tres consolas para poder ver 5 segundos nuevos de trama y 10 horas de relleno (cosa que en gran medida se podría aplicar al Chain of memories, para qué negarlo). Kingdom hearts es una saga que, de no ser por los últimos 5 segundos del último vídeo de Kingdom hearts II y del final secreto de ese mismo juego podríamos considerar cerrada, así que no me voy a complicar la vida. El día que saquen un megarecopilatorio con todos los spin off para una consola que ya tenga me lo pensaré. Mientras tanto, estoy muy bien con lo que tengo. 


Perdón, me voy por las ramas. Decía que por algún motivo no había vuelto a tocar este juego. Ya he descubierto el porqué. Veréis, yo me compré la Play Station 2 hace ya... ¿7 años? ¿8? No logro ni recordarlo. Lo importante es que fue la primera consola que me compré por mi mismo con mí dinero ganado trabajando en la tienda de mi padre durante todas mis vacaciones de verano. Yo tenía claro que quería la PS2, pues mi Game cube ya no daba para más, así que me obcequé en conseguir una nueva consola... sin fijarme antes en su catálogo. Así, el día que me la compré me di de bruces con mi estupidez: no conocía ningún título que me interesase jugar. Fue entonces cuando, en el estante de los juegos de segunda mano, vi la carátula que corona esta entrada. Movido por la curiosidad decidí cogerlo, pues en el peor de los casos solo gastaría 10€, me lo llevé para casa y en cuanto lo puse en mi consola vi por primera vez una GCI. No hace falta echarle mucha imaginación para saber qué cara puse al ver esta escena: 





Decir que se me cayeron los huevos al suelo es poco. Yo, acostumbrado a los juegos de Nintendo que prácticamente carecen de GCi, no pude sino alucinar ante tal portento gráfico. Hoy por hoy opino que tiene muchísimo más mérito Starfox Adventures, el cual tiene unos efectos visuales impresionantes para la época pero que carece de GCi que esto, que no es más que un vídeo realizado por ordenador para quedar bonito mientras que durante el resto del juego tenemos que aguantar las horrendas animaciones faciales de Sora, que por momentos parece que intentando rascarse la espalda con la llave espada se la metió por el culo, pero en aquella época lo que entraba por los ojos iba a misa. Qué puedo decir, todos hemos tenido 12 años.

La trama, sin ser nada del otro mundo, cumplía su función de llevarnos de un mundo Disney a otro para rememorar nuestras películas infantiles favoritas. Básicamente consiste en la búsqueda de los amigos de Sora, Riku y Kairi. Al llegar a un mundo Disney nos topamos con los problemas de ese lugar y, una vez solucionados y en camino a otro mundo, se nos presenta mediante videos cómo la trama de fondo (los ataques de los sincorazón, el paradero de Riku y Kairi, qué es la llave espada) avanza. Aún así, no llegaremos si quiera al primer mundo Disney sin darnos cuenta del mayor fallo de este juego: la cámara. No puedes hacer un Action-RPG con una cámara pegada a la nuca del protagonista, el campo visual resultante es demasiado reducido para realizar cómodamente las peleas más complejas. Por si esto no fuera suficiente, Kingdom hearts tiene un gran componente plataformero, así que sumad una cámara penosa con un personaje paralítico durante las 3/4 partes del juego y os imagináis la tortura que resultan según qué secciones.

Además, cuando a parte de todo esto nos encontramos con transiciones entre zonas de casi 30 segundos la cosa es simplemente absurda. No se trata de que se quede la pantalla en negro durante ese tiempo, no, sino que en uno de los últimos mundos tendremos que usar constantemente teleféricos para desplazarnos... viajes durante los cuales no podremos hacer nada más que mirar como el cachibache de marras se mueve a ritmo de pulga. Si aún fuera un recurso para ganar tiempo y cargar rápido la siguiente zona podría tragármelo... pero a sabiendas de que la habitación a cargar mide tres metros cuadrados y solo tiene un cofre... la verdad, no cuela. Eso (y no poder saltar los vídeos) son errores cometidos por los desarrolladores que, pese a no hacernos soltar el mando y mandar el juego a la mierda, sí que nos pueden amargar la partida durante un buen rato. Los encargados de hacernos lanzar el mando son los enemigos.


¿Recordáis lo que dije de las animaciones faciales?

Ponéos en mi situación. Conocéis todos los jefes del juego, sabéis cuando vais a tener que luchar y donde están los puntos de guardado, recordáis la mejor estrategia para cada enemigo... ¿vais a jugar en normal o en experto? Ahí estuvo mi error. Supuse que, en experto, los enemigos quitarían más vida y tú serías más débil. Ahí acerté. Donde me equivoqué fue al obviar algo que me parecía absurdo: que el número de enemigos fuera a incrementarse tanto. Kingdom hearts en experto no es un juego de habilidad: es un juego de paciencia y desgaste.

Quizás los que hayáis probado la saga lo recordéis, pero sino os refresco yo la memoria. Kingdom hearts es un juego que incita a visitar de nuevo los mundos superados para llenar nuestras arcas. Tesoros inaccesibles en primera instancia, marcas trío, dálmatas ocultos... hay una buena cantidad de motivos para pasearnos de vuelta por las zonas superadas. ¿Qué tiene de malo esto? Que es un auténtico sopor tener que matar a todos los enemigos del área para poder abrir el cofre, activar el trío o recoger a los cachorros.

"Joder tío, no seas agonías, ni que fuera para tanto matar a dos o tres sincorazón", diréis. Y si jugásemos en normal tendríais razón, pero en experto la cosa cambia. Es realmente frustrante pelear durante más de 5 minutos en una misma área contra enemigos del montón solo para abrir un cofre. Hubo días que, aprovechándome de mi superioridad defensiva, soltaba el mando, leía algo y dejaba que Donald y Goofy matasen a todos los enemigos del área. Ni que decir el dolor de culo que siente uno al ver que tras todo el esfuerzo realizado te dan un simple gumi coraza... o aparece una nueva oleada de enemigos dispuesta a posponer la apertura del cofre otros tantos minutitos hasta que decidan dejar de dar por culo.


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Fragments of sorrow

Como guinda, nos topamos con que para desplazarnos de mundo en mundo debemos superar un minijuego de navecitas en la cual llevaremos una nave llamada "nave gumi", nombre que viene de los cubos que la forman y que podemos modificar a nuestro placer... o así es en la teoría. Hasta casi la mitad del juego cada vez que queramos regresar a una fase ya superada deberemos repetir la zona de naves. Hasta casi la mitad del juego no dispondremos de una tienda para comprar mejoras para la nave. ¿Entendéis el problema? Durante la parte donde no podemos mejorar la nave cómodamente y tenemos que seguir con la porquería que nos dan al principio no haremos otra cosa que hacer viajes. A partir del momento en que podemos empezar a profundizar en su manejo y construcción ya casi no nos hará falta, pues habremos desbloqueado atajos que evitan estas fases.

Con esto no insinúo que fue una mala idea el permitirnos teletransportarnos. Al contrario, es una alivio no tener que repetirlo todo una y otra vez. Lo que intento decir es que lo mejor habría sido o poder teletransportarnos desde un primer momento o poder mejorar la nave de buenas a primeras. Habría sido todo mucho más ameno para el jugador, pues por si esto no fuera suficiente las fases de en el espacio son lo más soso que existe, con el plus de que en experto podremos morir prácticamente de dos impactos en según que trayectos, así que ya os podéis imaginar la gracia de pasarse 4 minutos esquivando enemigos por el mismo escenario que ya has pasado 15 veces (pues todas las fases tienen los mismos fondos, los mismos obstáculos y los mismos enemigos) para luego tener que repetirlo todo por un error absurdo.

Sé que, tal y como estoy diciendo esto, da la impresión de que Kingdom hearts es un juego del montón, pero nada más lejos de la realidad. Su OST es fantástica, tanto en lo que respecta a los temas Disney como a canciones originales; los jefes finales nos sorprenderán con sus combates, pues varios de ellos se alejan del típico "golpea-esquiva-golpea", siendo más de uno un puzle en si mismo; además, como ya comenté, los mundos superados son bastante rejugables, pues si queremos tener todas las magias, armas y técnicas será necesario volver a varios de ellos a por los cofres que antes no podíamos alcanzar. Aparte, no debemos olvidar su duración, la cual es realmente interesante: 30 horas he tardado en pasarme del tirón el juego sabiendo de antemano lo que tenía que hacer, con lo que completarlo al 100% sin tener ni idea del mismo puede llevarnos bien unas 40-45 horas.




En definitiva, Kingdom hearts es un conjunto de buenas ideas pero que no terminaron de cuajar del todo bien a causa de su horrible cámara y de varios errores de diseño que se subsanarían en su siguiente entrega (nave gumi, malas animaciones faciales, transiciones demasiado lentas...). Aún así, recomiendo a todos los amantes de la saga que no lo hayan probado y a los que busquen un Action RPG diferente que le echen un ojo, pues aunque el juego no sea de diez como muchos comentan sí se merece una oportunidad (y la saga a la que pertenece realmente debe ser jugada).

NOTA: 7,5

Link al análisis de Kingdom hearts II

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