martes, 8 de enero de 2019

Los premios de Anti a los mejores juegos de 2018



♪♫ Ring ring ♪♫


Hola, jefe Sudit. Sí, el año empieza bien, le estoy dando al Smash. ¿Qué, que apague la Switch? ¿¡Pero por qué? ... ¿Una entrada? ¿Ahora? ¿¡Mis GOTYs!? ... Sí, claro que quiero seguir en el blog. ... Pero si no cobro, no creo que pueda desped-¡Sí sí, ahora mismo voy, mañana a primera hora estará la entrada publicada! ¡Cuelgo!


[Onomatopeya de colgar el teléfono. No sé, un "click" o algo así.]





 
¡Buenos días a todas y a todos!
Coged asiento, porque aquí llegan, aquí están...




¡Los premios de Anti a los mejores juegos de 2018!





Este ha sido un año muy fructífero... ¡Pero que quede claro, aquí no hablaremos de los lanzamientos de 2018, sino de los títulos que yo he jugado durante este tiempo! ¿Y qué juegos son esos? Pues todos estos, listados según orden de jugada y con enlace a sus entradas en caso de tener texto en el blog:

Hatoful Boyfriend
Binary Domain
Metroid: Samus Returns
Fire Emblem Warriors
Axiom Verge
Fire Emblem Fates: Conquest
VA-11 Hall-A
Fire Emblem Fates: Revelations
FTL: Faster Than Light
Subsurface Circular
Kingdom Hearts Final Mix
Dark Souls III
Pac-Man 256
Mini Metro
Assassin's Creed Chronicles: China
Super Mario Run
Pokémon Pinball: Rubí y Zafiro
Pokémon Omega Rubí
Thumper
Superhot VR
Super Hydorah
Game Dev Tycoon
G-Darius
Odin Sphere: Leifthrasir
Taiko no Tatsujin: Session de Dodon ga Don!
Cube Escape: Seasons
Ikaruga
Persona 5
Yakuza Kiwami
Pokémon Mundo Megamisterioso
STAY
Deltarune
Tetris Effect
Xenoblade Chronicles
Pokémon: Let's Go, Eevee!
Hollow Knight
Sid Meier's Civilization VI
Lethal VR
Beat Saber


NO TERMINADOS
 
Nioh
Moss
Farpoint
Ibb & Obb
Assassin's Creed Origins
Dragon Quest XI
Opus Magnum 
Into the Breach
Super Smash Bros. Ultimate
Kingdom Rush Frontiers





¡Vaya vaya, cuanta variedad! Nada menos que 39 contendientes. Los juegos no terminados no entran en la competición de este año, se van para el siguiente, pero me da que ya hay una bonita lista sin ellos. Con tanto material, será mejor ahorrarse las presentaciones e ir directo al grano.




Premio a la sorpresa del año:

Hatoful Boyfriend 


Sí, sé que este juego ya se llevó un premio el año pasado, pero merece volver a aparecer y, técnicamente, lo jugué en enero de 2018 (y me sirve de excusa para spamear la entrada vieja). Hatoful Boyfriend ha sido mi primera visual novel, y no estaba preparado por tanta genialidad. Una lectura sorprendente, una narrativa muy bien escrita, una historia profunda camuflada bajo un simulador de citas con palomas. La sorpresa del año, ese juego del que no esperaba nada y que recordaré durante mucho, mucho tiempo. 




 
Premio a "por fin he terminado este juego que llevaba aparcado demasiado tiempo":

Assassin's Creed Chronicles: China 


Lo empecé, le di varias horas y lo dejé en pausa por vete a saber qué. Volví a él, inicié una nueva partida para recordar cómo iba todo, llegué hasta donde me quedé la anterior vez y lo volví a abandonar por otros quehaceres. Pero al final, tras meses y meses de vergüenza y culpa, lo he terminado, y la sensación final ha sido más que buena. Es un Mark of the Ninja sin tanta profundidad jugable, pero con un arte precioso y unos retos divertidos y variados. Si os van el sigilo y las dos dimensiones, deberíais darle una oportunidad. 




 
Premio a la rejugada del año: 

Pokémon Pinball: Rubí y Zafiro 


Paseando tan tranquilo me encontré este cartucho a la venta en una tienda retro. Qué recuerdos, qué nostalgia... Me invadió la dulzura de las horas invertidas en este juego cuando era pequeño. Por supuesto, me hice con él. No solo me ha gustado tanto como la primera vez, sino que conserva toda la diversión intacta, inmutable ante el paso de los años. Un pinball sencillo, directo y con pokécarisma. 





Premio al mejor juego indie de antes que se hablara de juegos indie: 

Ikaruga 


Un desarrollo de años y de un equipo pequeño. Una obra concebible solo por genios. Si tenéis que probar un único shmup en vuestra vida, que sea este, no solo porque sea uno de los más detallistas en su diseño de niveles, sino porque sus opciones de dificultad y la mecánica de los colores lo hacen a la vez desafiante y accesible. Es un ballet delicadísimo, una danza como pocas hemos visto en nuestras consolas.



  
Premio a "apoyad el producto nacional, leñe":

Super Hydorah 


¡Pero también hemos tenido un matamarcianos de la vieja escuela! Super Hydorah rinde homenaje a la historia de todo un género de la mejor forma posible, con niveles variadísimos, jefes que nos meterán caña y un buen abanico de armas para destruirlos. Sin duda, de lo mejor que ha salido del género estos últimos años. 



  
Premio al juego que me ha hecho admitir abiertamente que me va el Vocaloid: 

Taiko no Tatsujin: Session de Dodon ga Don! 


¡Los tambores son la bomba! Sí, se puede jugar perfectamente con mando, pero coger los palos y meterle golpes al taiko es desestresante como él solo. Tiene música de anime, de videojuegos, vocaloid, k-pop y clásica. Si os hacéis con él, es un éxito asegurado en las fiestas. 




 
Premio Majima al mejor Majima: 

Yakuza Kiwami 


El juego es muy irregular, pero me lo he pasado como un enano con él. ¿Sabéis el tiempo que hacía que no jugaba a un beat'em up de este calibre? ¡Y la historia es buena, de verdad! Sé que la saga degenera mucho, pero aquí la trama es interesante, te engancha. Kiryu compite con Adam Jensen como mi husbandu, y Majima es la monda, un meme a la vez cómico y perturbador. Espero darle al Yakuza 0 este 2019. 




 
Premio al juego que es más la hostia en patinete: 

Thumper 


Siete años en desarrollo, siete años de esfuerzo y dedicación de dos personas que nos han regalado una experiencia única. Thumper es ritmo, es violencia, y es ese juego que con un botón y una cruceta te reta a que lo domines. La curva de dificultad y aprendizaje es exquisita, el talento que destila es enorme y la fuerza de sus partidas se quedan grabadas en nuestros nervios.




 
Premio a la mejor tragedia griega: 

Odin Sphere: Leifthrasir 


Ahora que he visto Edipo rey puedo decir, con todas las de la ley, que Odin Sphere es una tragedia griega de cabo a rabo. Hay dramas, fatalidad y jugarretas del destino, pero también hermosura en cada personaje y escenario. ¡Y es endiabladamente divertido! No me atrevo a decir que lo haya gozado más que Muramasa: The Demon Blade, pero seguramente sea el mejor título de Vanillaware.




 
Premio a ese juego indie mejor que muchos triple A con presupuesto millonario: 

Hollow Knight 


Sabe qué debe tener un buen metroidvania y lo demuestra. Un mundo sumamente gratificante de explorar, los controles responden a las mil maravillas y la sensación de descubrimiento y de adentrarse en lo desconocido se mantiene de principio a fin. Ojalá Sudit lo retome pronto, porque es de esos juegos que gozas comentando con los demás.




 
Anti-premio a "has estado a puntito, pero a puntito de llegar a la cima, y aún así la has cagado en todo": 

Xenoblade Chronicles 


Xenoblade Chronicles lo tenía todo, tenía todos los números para ser un firme candidato al GOTY de este año, pero se derrumbó por su propio peso. El inicio es muy bueno y la capa de pintura que lo recubre maquilla muy bien sus problemas, pero en cuanto aparece la primera grieta se cae toda a pedazos. No me ha dejado un mal sabor de boca; de hecho, lo he disfrutado bastante y ya tengo ganas de jugar a la segunda parte, pero la sensación omnipresente es que habría podido ser un juego excelente si no hubiera caído en problemas demasiado obvios. 



  
Anti-premio a Persona 5: 

Persona 5 


No pienso darle el GOTY a Persona 5. Punto. Me da igual si me ha enganchado o no, me da igual si es el JRPG con el que más he disfrutado luchando o si le metí 150 horas en dos semanas; no puedo darle ese reconocimiento a un juego tan machista, abiertamente homófobo y que idealiza las relaciones de dependencia; con una trama extremadamente absurda y con unos personajes sin pies ni cabeza. Me lo he pasado muy bien con él, pero también me ha asqueado en más de una ocasión, y es de las pocas obras con las que me he sentido insultado directamente.





 
Premio al mejor juego del año:

La Realidad Virtual


Ni 4K, ni 3D ni tonterías; el futuro es la realidad virtual. Este año me he hecho con unas gafas PlayStation VR, y con ellas he vivido algunos de los videojuegos más impresionantes que a día de hoy uno puede experimentar. La inmersión es real, real como la vida misma, y el viaje que supone descubrir este mundo es algo indescriptible. Da igual cuantas veces te lo cuenten, no te lo crees hasta que no lo pruebas tú mismo. Thumper estalla en una versión empastillada del viaje interdimensional de 2001: una odisea en el espacio; Superhot VR te hace olvidar que lo que ves, lo que mueves, lo que tocas no es real; Beat Saber es el frenesí más vivo y estimulante que he jugado en una consola; Tetris Effect convierte el más clásico de los videojuegos en una experiencia que rompe moldes; Moss es una aventura con todas las de la ley en la que entramos en adorables dioramas de castillos y cuentos de hadas... Da igual las palabras que use, jamás le haré justicia al que, con toda certeza, será el próximo gran paso de los videojuegos. Es un sueño, el sueño que todos hemos tenido de meterse dentro del juego, y cada vez que me pongo el casco sigo esbozando una sonrisa tan pura y sincera como la de un niño que desempaqueta su primera consola.









Acerca de Anti

Ingeniero catalán aficionado a calcular por qué
tu juego favorito no cumple las leyes de la física.
En los fightings coge a los que dan abrazos.



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